Un hongo es mucho más que la seta que vemos en el campo.
El verdadero hongo está oculto, normalmente bajo el suelo. Lo constituyen multitud de filamentos, llamados hifas, que se ramifican y entrelazan formando una red complicada, unas veces diminuta y otras de grandes dimensiones. Esta red recibe el nombre de micelio, y por lo general sobrevive durante varios años.
Si las condiciones ambientales (temperatura, humedad…) son las adecuadas, el micelio fructifica. Entonces es cuando aparecen las setas.
- Las setas, por lo tanto, son el fruto del hongo de la misma manera que las manzanas son fruto del árbol llamado manzano.
Pisotear en exceso, escarbar o remover la tierra son prácticas que destruyen los micelios.